El último día de verano

Había una vez una niña a la que le encantaba la playa. Era el último día de verano, y Estela estaba decidida a que fuera el más divertido de todos. La escuela comenzaba mañana, pero eso no le importaba: ¡el verano todavía podía dar…

El Guardián de las Emociones

Había una vez, en un valle lleno de flores que parecían caramelos de colores, un pequeño pueblo llamado Yutori. Allí vivían niños y niñas que jugaban desde que salía el sol hasta que la luna bostezaba. Sin embargo, no todo era perfecto: en la…

El Club del Miedo Chistoso

Había una vez un pueblo muy, pero que muy raro, se llamaba Risueñilandia. Allí, todos tenían algún miedo curioso: la panadera le temía a las rosquillas con demasiado azúcar, el cartero se asustaba de los buzones vacíos, y Don Tomate, el verdulero, se ponía…

Luz la Dudosa y el Reino de las Mil Opciones 

Había una vez, en un mundo donde los dragones hacían concursos de eructos de fuego (y el jurado llevaba extintores, y cascos por si acaso), una niña llamada Luz la Dudosa. ¿Por qué “la Dudosa”? Porque siempre dudaba de todo: Si le daban helado…

El cajón de los sueños

Había una vez, en un rincón secreto del universo, un cajón muy especial. No era un cajón de calcetines ni de galletas (aunque ojalá lo fuera, porque a veces a nuestra protagonista le entraba mucha hambre). Era el Cajón de los Sueños, y dentro…

El Bosque de las Excusas

Había una vez, en un bosque lleno de luciérnagas que brillaban como estrellas y árboles que murmuraban canciones al viento, existía un pajarito azul llamado Lumo. Lumo era alegre, cantaba todas las mañanas y tenía muchos amigos. Pero un día, llegó al bosque un…

El unicornio de las burbujas mágicas

Había una vez, en el Reino de los Pastelitos Soñadores, una niña llamada Sara. Ella tenía una sonrisa tan grande que a veces las mariposas se confundían y pensaban que era un arcoíris, y terminaban chocándose con su cara, así que siempre iba envuelta…

El Jet Diner: Donde los aviones aterrizan y las papas vuelan

En un rincón polvoriento de la vieja Ruta 62,2, justo donde el asfalto parecía perderse en el horizonte, había un restaurante único en el mundo: El Jet Diner. No tenía un letrero de neón cualquiera, sino un avión antiguo clavado en el techo, con…

El ogro que perdió su calcetín

Había una vez un ogro llamado Gorgojo, en un país llamado… Chupilandia Saltarina. No era un ogro malo, ni asustaba a la gente, ¡al contrario! Era tan distraído que siempre se metía en líos. Una vez se sentó encima de una tarta de cumpleaños…

El cuento sin fin

Había una vez un pueblo donde vivía un niño llamado Izan, que amaba tanto los cuentos que siempre pedía: —¡Otro, otro, otro más! Un día, su abuela le regaló un libro muy gordo, tan gordo que parecía una almohada gigante como las que hay…